Refugiados

La guerra ha forzado a millones de familias a huir de sus hogares

Esta es la historia más urgente de nuestro tiempo

El queso de la vida: refugiados que hacen del emprendimiento su mejor solución

“Nosotros también sufrimos mucho, pero le ponemos ganas, alegría y fortaleza”…

Cristina Pardo, voluntaria Cascos Blancos, Argentina

En el recorrido diario por el campamento, siempre unas manitos pequeñas tomaban las mías: eran los chicos…

La historia de Bayan Mahmud, Argentina

Desde que los padres de Bayan Mahmud murieron en una ola de ataques tribales el año 2005, Bayan y su hermano Muntala, debieron quedarse en un orfanato…

La historia de Esmeralda

Esmeralda perdió a su padre y a su hermano en el conflicto armado en Colombia. Años más tarde su esposo fue asesinado por negarse a pagar vacunas…

La historia de Khulood

Te dicen que partirás rumbo a un centro de tránsito en Rumania y que puedes llevar 5kg de equipaje en la cabina y 20kg en las maletas. Eso es todo…

Historias de refugiados: Nefry

Historias de refugiados: Nefry

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La historia de María

A pesar de ser víctima del desplazamiento y de violencia de género en su país de origen, y discriminada por el solo hecho de ser una refugiada…

Una casa llena de futuro: la experiencia comunitaria de San Patricio

Es en la minga, en el trabajo comunitario, donde la integración y el bienestar del otro toman la palabra.

Esta vida de desplazados es muy dura

Esta vida de desplazados es muy dura ya que hemos recurrido a varias entidades gubernamentales sin resultado y tengo tanta melancolía y desespero de verme yo misma tan impotente y ver a mi familia aguantando hambre ya que yo era el eje de esa familia y ver como mi familia se derrumba en el limbo de la vida por una guerra que no tenemos la culpa nosotros…

Huimos de mi país porque mis hijos se negaron a ser parte de las pandillas

Salí de El Salvador buscando refugio, me reconocieron como refugiada en México. Huimos de mi país porque mis hijos se negaron a ser parte de las pandillas en El Salvador. Salimos hace ya dos años…

Un jardín de paz, emoción, unidad, sabiduría, integración y orgullo

¿Quién hubiera pensado que un pedacito de tierra cultivado con plantas, verduras y frutas tenía tanto potencial?

1 familia separada por la guerra es demasiado

Conoce más sobre nuestro trabajo con los refugiados en ACNUR.org y ACNUR.es