Declaración sobre sobre el deterioro de la situación de las personas refugiadas eritreas en Tigray
El siguiente contenido corresponde a las declaraciones formuladas hoy por un portavoz de ACNUR en una rueda de prensa en el Palacio de las Naciones, en Ginebra.
La situación en los campamentos de refugiados eritreos de Mai Aini y Adi Harush, en la región etíope de Tigray, se ha deteriorado rápidamente con la intensificación del conflicto en la zona durante los últimos dos días.
Se ha confirmado la muerte de al menos una persona refugiada eritrea, con informes fiables de arrestos, detenciones, golpizas, saqueos y disparos esporádicos. Decenas de miles de personas refugiadas, que temen por sus vidas, están actualmente atrapadas y no pueden moverse debido a la inseguridad y al continuo movimiento de tropas en la zona. El personal de ACNUR sobre el terreno, así como otros socios humanitarios, no pueden llegar a los campamentos para ayudar a las personas refugiadas.
Hacemos un llamado urgente, tanto al Gobierno Federal de Etiopía como al Gobierno Regional de Tigray, para que cumplan sus obligaciones en virtud del derecho internacional, lo que incluye respetar el carácter civil de los campamentos de refugiados, y el derecho de las personas refugiadas y de toda la población civil a ser protegidas de las hostilidades.