Declaración conjunta del Gobierno de Kenia y el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados: Hoja de ruta para los campamentos de refugiados de Dadaab y Kakuma
El presidente Uhuru Kenyatta se reunió hoy con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, en Nairobi, para discutir cuestiones relacionadas con las personas refugiadas y solicitantes de asilo en la región, así como para recibir información sobre el estado de los campamentos de refugiados de Kakuma y Dadaab, en seguimiento a las reuniones del Alto Comisionado con los secretarios de gabinete, el Dr. Fred Matiang'i y la Embajadora Raychelle Omamo.
Esta reunión se produce a raíz de la intención comunicada por el Gobierno de trabajar hacia el cierre de los campamentos de refugiados en Kenia. Por lo tanto, se formará un equipo conjunto compuesto por funcionarios del Gobierno y la Agencia de la ONU para finalizar e implementar una hoja de ruta sobre los próximos pasos hacia una gestión humana de las personas refugiadas en ambos campamentos.
La hoja de ruta, que se presentó al Gobierno de Kenia a principios de abril, incluye el regreso voluntario de las personas refugiadas en condiciones de seguridad y dignidad, salidas a terceros países bajo diversos arreglos y opciones alternativas de estadía en Kenia para ciertas personas refugiadas de los países de la Comunidad de África Oriental (EAC, por sus siglas en inglés).
“Nos tomamos en serio la finalización del programa de repatriación que iniciamos en 2016, teniendo en cuenta nuestras obligaciones internacionales y nuestra responsabilidad nacional. Por lo tanto, reiteramos nuestra posición anterior de cerrar los campamentos de Dadaab y Kakuma antes del 30 de junio de 2022”, señaló el Secretario de Gabinete, Fred Matiang’i.
El Gobierno de Kenia y ACNUR están de acuerdo en que los campamentos de refugiados no son una solución a largo plazo para el desplazamiento forzado y están comprometidos en trabajar juntos para encontrar soluciones alternativas que estén alineadas con los principios y objetivos de responsabilidad compartida del Pacto Mundial sobre los Refugiados (GCR, por sus siglas en inglés).
“Creo que el gobierno y la ciudadanía de Kenia continuarán mostrando su generosa hospitalidad hacia las personas refugiadas como lo han hecho durante casi tres décadas, mientras mantenemos discusiones sobre una estrategia para encontrar las soluciones más duraderas, apropiadas y basadas en los derechos para las personas refugiadas y solicitantes de asilo que residen en los campamentos de refugiados de Dadaab y Kakuma”, expresó el Alto Comisionado de la ONU.
“El cierre de los campamentos debe verse como una aspiración. No estamos ahuyentando a la gente, pero un campamento no es algo permanente. Es un lugar de incertidumbre. Nadie debería vivir en un lugar de incertidumbre o indignidad generación tras generación. En lo que estamos trabajando ahora es en cómo lograr esto de manera cooperativa, que esté alineado con el Pacto Mundial sobre los Refugiados”, añadió la Secretaria del Gabinete de Relaciones Exteriores, la Embajadora Raychelle Omamo.
El Alto Comisionado, Grandi recibió con satisfacción el compromiso continuo del gobierno con el GCR durante este proceso. “Me tranquilizan las garantías del gobierno, de que continuarán brindando protección y servicios a las personas refugiadas y solicitantes de asilo en Kenia, mientras se buscan diversas soluciones”.
Entre las actividades previas contenidas en la hoja de ruta del gobierno se encuentra una resolución unánime que fue respaldada recientemente por embajadores y representantes de países de África Oriental que tienen una relación diplomática mutua con Kenia cuando se reunieron con una delegación encabezada por el Secretario del Gabinete del Interior, el Dr. Fred Matiang'i.
“Las personas refugiadas de los países de África Oriental tendrán la opción de obtener un permiso de trabajo de forma gratuita para que puedan integrarse en las comunidades de Kenia o regresar a su país de origen”, compartió el Dr. Matiang’i.
La verificación digital de las personas kenianas, que actualmente también están registradas como refugiadas, comenzará a su debido tiempo. Esto informará la emisión de la documentación adecuada a la ciudadanía de Kenia y garantizará su eliminación de la base de datos de personas refugiadas.
Kenia ha soportado la carga de albergar personas refugiadas durante casi tres décadas, y los campamentos en aumento han sobrepasado su capacidad para albergar poblaciones. El gobierno también ha expresado su gran preocupación por la seguridad tanto de las personas kenianas como de las personas refugiadas en el campamento.
Actualmente viven 433.765 personas refugiadas en los campamentos de Dadaab y Kakuma.