Emergencia en Afganistán

Millones de personas en Afganistán padecen miseria y hambre debido a décadas de conflicto, años de sequía, temperaturas gélidas durante el invierno y el colapso de la economía del país, que ha experimentado repetidas crisis humanitarias.

La situación en Afganistán es terrible.

ACNUR y sus socios lanzaron planes de respuesta conjunta para brindar asistencia humanitaria, que es vital. En Afganistán residen 24 millones de personas, y 5,7 millones de afganos – y sus comunidades de acogida – requieren apoyo en cinco países vecinos.

 

Dona ahora

 

24 millones

de personas necesitan socorro humanitario con urgencia en Afganistán


800.000

personas desplazadas al interior del país en 2021 (OCHA)


3,5 millones

de personas han sido desplazadas por conflictos dentro de Afganistán (al 31 de diciembre de 2021)


 

5,7 millones

de personas afganas y miembros de las comunidades de acogida en cinco países vecinos requieren apoyo

“No tuvimos tiempo de tomar nada; huimos apenas con una manta”.

– Maryam, afgana de 24 años que reside en Mazar-e Sharif luego de haber sido desplazada dentro de su propio país

La mitad de la población afgana padece hambruna aguda. Además, alrededor de 3,5 millones de personas han sido desplazadas debido al conflicto, y buena parte de la niñez no está recibiendo educación. El sistema sanitario está por colapsar, los derechos fundamentales de mujeres y niñas corren peligro, los granjeros y pastores luchan contra la crisis climática, y la economía del país va en picada.

Aunque el conflicto ha disminuido, la violencia, el miedo y las carencias siguen obligando a la población a cruzar las fronteras con otros países (en particular, Irán y Pakistán).

Afganistán atraviesa por una crisis humanitaria y de desplazamiento.

En 2021, más de 800.000 personas afganas fueron desplazadas dentro de su propio país; el 80% de ellas son mujeres, niñas y niños. Esta situación se agrava con recurrentes desastres naturales, con inclusión de los daños provocados por sismos y sequías, así como el significativo impacto sanitario y las repercusiones socioeconómicas de la pandemia de COVID-19.

La afgana es una de las poblaciones refugiadas de mayor tamaño en el mundo. Alrededor de tres cuartos de las personas afganas refugiadas han sido acogidas por Irán y Pakistán, es decir que en estos dos países se tiene registro de más de 2,2 millones de personas refugiadas.

La niñez afgana se encuentra atrapada en medio de la crisis. De hecho, el 65% de la población afgana está compuesto por niñas, niños, jóvenes y adolescentes, quienes, considerando la inseguridad y los desafíos económicos, no saben qué les depara el futuro.

¿Qué está haciendo ACNUR para ayudar?

ACNUR tiene el compromiso de permanecer y cumplir en Afganistán. Por ello, ha activado la respuesta de emergencia para proteger a las personas en mayor situación de vulnerabilidad y brindar asistencia a la población afgana proporcionando alojamiento, apoyando en el aislamiento térmico de los hogares, construyendo infraestructura sanitaria e hídrica, distribuyendo artículos de primera necesidad, y ofreciendo apoyo psicosocial dentro de Afganistán y en los países vecinos.

En medio del invierno, ACNUR ha ampliado considerablemente su alcance mediante asistencia específica que ayuda a las familias a sobrevivir. La asistencia de emergencia incluye distribuir artículos como mantas, estufas, lámparas solares, kits de aislamiento térmico, prendas de vestir, artículos esenciales para el hogar, y calefacción.

Aunado a lo anterior, prevenir la propagación de la COVID-19 sigue siendo una prioridad. Para ayudar a reducir el riesgo tanto como sea posible, los kits de socorro que ACNUR ha estado distribuyendo a las familias desplazadas incluyen bidones y baldes, que resultan particularmente importantes en áreas donde no es fácil tener acceso a agua limpia. ACNUR también ha instalado estaciones para el lavado de manos y continúa distribuyendo kits de higiene, que incluyen cubrebocas y jabón.

De cualquier forma, la asistencia humanitaria sigue siendo una necesidad apremiante. ACNUR ha estado ampliando el alcance de su respuesta, pero necesita apoyo para asistir y proteger a las personas forzadas a huir.

Cubrir las necesidades en Afganistán requiere más de $8.000 millones de dólares (USD) este año.

El plan humanitario para dar respuesta a la situación en este país requiere $4.400 millones de dólares (USD), el llamamiento humanitario de mayor magnitud jamás lanzado en favor de un país. Por otra parte, en términos del Marco de Compromiso de Transición de las Naciones Unidas, la ONU necesita $3.600 millones de dólares (USD) más para sostener la prestación de servicios sociales esenciales, apoyar los sistemas comunitarios y continuar brindando servicios, sobre todo a mujeres y niñas.

Estos planes potenciarán el apoyo agrícola, la distribución de alimentos esenciales y albergues de emergencia, la prestación de servicios sanitarios, la alimentación, el agua y el saneamiento, la protección, la educación de emergencia, los programas comunitarios e infraestructura de otro tipo.

El plan de respuesta regional para los refugiados requiere, además, $623 millones de dólares (USD) para cuarenta organizaciones que trabajan en protección, salud y alimentación, seguridad alimentaria, alojamiento, artículos para el hogar, agua y saneamiento, resiliencia y medios de vida, educación y logística. Dentro de este llamamiento, ACNUR requiere $263 millones de dólares (USD).

Apoya nuestra labor

Las cifras más recientes se encuentran disponibles en el Portal de datos. Por otra parte, el sitio del Enfoque Global (Global Focus) contiene las últimas actualizaciones.