La protección comunitaria es un pilar de la respuesta del ACNUR para los indígenas venezolanos en Brasil
Las acciones fortalecen la autonomía de las comunidades vulnerables al dar espacios de participación y construcción colectiva en la búsqueda de soluciones.
Entre abril y julio, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) realizó un levamiento de las acciones que llevó a cabo para los indígenas venezolanos con base en su mecanismo de protección comunitaria, una estrategia fundamental para responder al flujo de refugiados y migrantes de Venezuela.
El Informe de Actividades del ACNUR para Poblaciones Indígenas de julio estima que cerca de cinco mil indígenas de cuatro grupos étnicos diferentes (E'nepa, Warao, Pemon y Kariña) buscaron protección en Brasil, siendo 3.200 solicitantes de asilo.
La encuesta incluye acciones que van desde la donación de artículos básicos, capacitaciones y consultas para la formulación de convenios de convivencia en albergues hasta un periódico comunitario y actividades de rescate cultural.
“La protección comunitaria es un mecanismo utilizado por ACNUR para involucrar a las comunidades afectadas por crisis en la búsqueda de soluciones”, explica Sebastián Roa, oficial asociado de protección. Según él, el objetivo es identificar estrategias con las comunidades que aprovechen sus propias capacidades para construir respuestas a las diversas dificultades que enfrentan.
En julio, ACNUR facilitó una visita de líderes indígenas al hospital de campaña de Boa Vista, conocido como Área de Protección y Atención (APC), donde las personas sintomáticas confirmadas con COVID-19 son trasladadas para aislamiento y asistencia médica. El propósito de la visita fue presentar los servicios disponibles y las estructuras de hospedaje hospitalario a los indígenas, para que los líderes puedan explicar su importancia a la comunidad.
Otra acción destacada es la creación del periódico comunitario Deje Nome Yutukayo Atuankoin (Noticias Reales, en idioma warao). Es un canal de comunicación que responde a las especificidades culturales de las etnias Warao y E'ñepa acogidas en Boa Vista, fomentando el ejercicio de sus derechos y la producción de información por ellos mismos sobre su propia comunidad.
“Es una de nuestras estrategias de protección más importantes. Garantizamos así la derivación a los servicios públicos, monitoreando a las poblaciones indígenas con necesidades identificadas, además de promover el rescate cultural y la autonomía de estas personas”, dice Sebastián.
En el caso de la etnia Warao, que representa el 66% de los refugiados y migrantes indígenas venezolanos en Brasil, son los aidamos, los líderes, quienes actúan como los principales portavoces de la comunidad. Pero para garantizar la participación de toda la población, ACNUR también implementa enfoques de edad, género y diversidad al consultar a la comunidad.
Las acciones se desarrollan principalmente en la Región Norte, donde se concentra la mayoría de los aproximadamente cinco mil indígenas venezolanos en Brasil. En Manaos y Belém, ACNUR promovió, entre otras acciones, sesiones de debate sobre el papel de la mujer en sus comunidades y desarrolló una metodología de consulta sobre un acuerdo de convivencia para el pueblo Warao.
También se están tomando importantes iniciativas en el eje Sur-Sureste. ACNUR ha apoyado a estos estados a través del trabajo conjunto con agentes gubernamentales, organizaciones socias de la sociedad civil, redes, colectivos y consejos comunitarios, en la coordinación de grupos de trabajo y acciones para proteger e integrar a las poblaciones indígenas refugiadas y migrantes.
La acción incluye identificar las necesidades específicas de esta población, compartir conocimientos y buenas prácticas en la acogida y desarrollar estrategias de intervención en contextos de tránsito y larga estancia.
Todas las acciones de protección comunitaria, así como el perfil demográfico de los pueblos indígenas venezolanos en Brasil, están disponibles en su totalidad en el Informe de actividades de ACNUR para las poblaciones indígenas de julio.
ACNUR trabaja en apoyo de la Operación de Acogida del Grupo de Trabajo de Logística Humanitaria, la respuesta de emergencia del Gobierno brasileño al flujo de venezolanos. La agencia opera en los tres principales frentes de trabajo de la Operación de Acogida: ordenamiento y documentación de fronteras, albergue e interiorización.
ACNUR agradece a todos sus donantes las importantes contribuciones que nos permiten seguir trabajando para brindar dignidad, protección y seguridad a los refugiados y solicitantes de asilo en territorio brasileño. Estas actividades con la población indígena fueron posibles gracias al apoyo financiero de Estados Unidos, Japón, Luxemburgo y la Unión Europea, específicamente para la operación del ACNUR en Brasil.
Estas acciones fueron realizadas por ACNUR en el marco de la Plataforma R4V - Respuesta a los venezolanos, una coordinación interinstitucional del sistema de Naciones Unidas y la sociedad civil. La Plataforma R4V está compuesta por un conjunto de socios y tiene como objetivo responder al flujo de venezolanos en América Latina y el Caribe. En Brasil, la Plataforma R4V está compuesta por 13 agencias de la ONU y 27 organizaciones de la sociedad civil.