Más de 100.000 personas han sido desplazadas por enfrentamientos al norte de Camerún
El siguiente contenido corresponde a las declaraciones formuladas hoy por un portavoz de ACNUR en una rueda de prensa en el Palacio de las Naciones, en Ginebra.
Al menos 100.000 personas han tenido que abandonar sus hogares a causa de los enfrentamientos intercomunitarios que se han dado en las últimas dos semanas en la región norte de Camerún. Sin embargo, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, estima que la cifra pudiera ser mucho más alta.
ACNUR calcula que más de 85.000 personas huyeron a Chad en los últimos días y que alrededor de 15.000 han sido desplazadas al interior de Camerún. En vista de que el acceso humanitario es limitado en la zona, estas cifras quizás sean mucho más altas.
Todo parece indicar que el desplazamiento hacia Chad se ha acelerado: luego de que 30.000 cruzaron la frontera en busca de protección, el total casi triplica las cifras reportadas la semana pasada.
Las pérdidas humanas también han aumentado: 44 personas murieron y 111 sufrieron lesiones, mientras que la semana pasada perecieron 22 personas y 30 resultaron heridas. En total, 112 aldeas se redujeron a cenizas.
La niñez comprende gran parte de las llegadas recientes a Chad; y, en lo que respecta a la población que llega al país, el 98% son mujeres. Cerca de 48.000 personas han encontrado protección en 18 sitios urbanos en N’Djamena, capital de Chad, mientras que 37.000 se encuentran en 10 sitios rurales en la orilla del Río Logone.
Junto con las autoridades, ACNUR, otras agencias de la ONU y sus socios humanitarios se apresuran para brindar asistencia vital. La agencia ha declarado que se trata de una emergencia grado 2; por tanto, está coordinando las operaciones para brindar asistencia a las personas afectadas en Camerún y a las personas refugiadas en Chad.
Al menos 100.000 personas han sido desplazadas por la fuerza debido a los enfrentamientos por la escasez de recursos
Las personas refugiadas necesitan con urgencia albergue, mantas, colchonetas y kits de higiene. Algunas de ellas han sido generosamente acogidas por las comunidades locales; sin embargo, otras aún duermen a la intemperie, debajo de árboles.
ACNUR y Médicos Sin Fronteras desplegaron clínicas móviles en buena parte de los asentamientos. En las clínicas se llevan a cabo evaluaciones médicas y, cuando el caso lo amerita, este se remite a instalaciones médicas nacionales. ACNUR, la Cruz Roja de Chad y la Agencia para el Desarrollo Económico y Social, una ONG de Chad, han estado distribuyendo alimentos calientes en todos los asentamientos.
Además, con el objeto de proteger a las personas refugiadas en congruencia con las normas internacionales, los equipos de ACNUR han estado apoyando al Gobierno en la identificación de asentamientos nuevos más allá de la frontera.
En la región norte de Camerún, se desplegaron las fuerzas de seguridad y se están llevando a cabo operaciones de desarme. Si bien se han reportado pocos incidentes en la última semana, las tensiones aún no han dado tregua.
Por motivos de seguridad, ACNUR aún no tiene acceso a Logone Birni, el distrito rural donde comenzaron los enfrentamientos. Nuestros equipos en las ciudades de Maroua y Kousseri están evaluando las necesidades humanitarias y de protección de las personas desplazadas dentro del país. Muchas de ellas han reportado dificultades para encontrar agua potable y no tienen acceso a letrinas. En consecuencia, van en aumento los problemas de higiene.
Los enfrentamientos iniciaron el 5 de diciembre en Ouloumsa, una aldea fronteriza, luego de conflictos entre granjeros, pastores y pescadores por los menguantes recursos hídricos. La competencia por los recursos – en especial el agua – se está exacerbando debido a la crisis climática. La superficie del Lago de Chad ha disminuido hasta 95% en los últimos 60 años.
ACNUR y las autoridades de Camerún han encabezado esfuerzos de reconciliación; para ello, organizaron un foro a principios de diciembre en el que los representantes de la comunidad se comprometieron a poner fin a la violencia. Sin embargo, mientras no se emprendan acciones urgentes para resolver la crisis de raíz, la situación corre el riesgo de empeorar.
ACNUR solicita el apoyo de la comunidad internacional para brindar asistencia a las personas desplazadas por la fuerza; además, insta a que la violencia acabe para que las personas puedan volver a casa de forma segura.
Chad ha dado acogida a cerca de un millón de personas refugiadas y desplazadas internas (PDI); por su parte, en Camerún se encuentran 1,5 millones de personas refugiadas y desplazadas internas.
Los recursos financieros para hacer frente a la situación en ambos países siguen siendo pocos. De hecho, de los montos que ACNUR requería para 2021 (99,6 millones de dólares en Camerún y 141 millones de dólares en Chad), apenas ha recibido el 52% y 54%, respectivamente. ACNUR necesita apoyo adicional con urgencia para responder a la situación.
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Para obtener más información con respecto a este tema, favor de contactar a:
- En N'Djamena, Aristophane Ngargoune, [email protected], +235 66 98 37 92
- En Yaoundé, Xavier Bourgois, [email protected], +237 90 04 99 96
- En Dakar (regional), Fatoumata Sinkoun Kaba, [email protected], +221 78 526 87 14
- En Dakar (regional), Selim Meddeb, [email protected], +221 77 092 13 52
- En Ginebra, Matthew Saltmarsh, [email protected], +41 22 739 7943
- En Nueva York, Kathryn Mahoney, [email protected], +1 347 443 764