ACNUR acoge el apoyo del Papa Francisco a los desplazados internos
Comentario de Gillian Triggs, Alta Comisionada Auxiliar para la Protección del ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados
“En el Día Mundial de los Migrantes y Refugiados, ACNUR agradece el mensaje del Papa Francisco que destaca la difícil situación de las personas que se han desplazado dentro de su propio país.
Actualmente hay 45,7 millones de desplazados internos en el mundo. Muchos de los desplazados se encuentran en países que enfrentan conflictos prolongados e inseguridad. Han sido expulsados de sus hogares por la violencia, la persecución y las graves violaciones de los derechos humanos y otros eventos traumáticos.
La pandemia de COVID-19 ha agravado su vulnerabilidad, precariedad y sufrimiento.
Nos hacemos eco de la súplica compasiva del Papa de escuchar a las personas desplazadas y fomentar la cooperación internacional para garantizar que nadie se quede atrás.
Como nos ha demostrado la pandemia mundial, podemos trabajar juntos para abordar los desafíos mundiales a través de la inclusión y la solidaridad.
Hacemos un llamado a los Estados para que presten especial atención a las necesidades de las personas desplazadas y garanticen su protección e inclusión en los sistemas de salud pública y los planes de recuperación a medida que la pandemia cede.
Reiteramos el llamamiento del Papa para empoderar a las personas desplazadas y apoyar sus contribuciones positivas a las comunidades.
Muchas personas desplazadas internas han utilizado sus habilidades y recursos para ayudar a responder a la pandemia. Desde Ucrania hasta Colombia y más allá, están contribuyendo a las soluciones, trabajando en primera línea con servicios médicos y produciendo equipos de protección personal, jabón y productos de higiene.
Sin embargo, mientras continúen las causas fundamentales del conflicto y el desplazamiento, la protección seguirá siendo el desafío más fundamental.
Por lo tanto, nos complace anunciar el compromiso del ACNUR de formar un Consejo Multirreligioso de Líderes, junto con Religiones por la Paz, para apoyar los esfuerzos de consolidación de la paz, inclusión y reconciliación.
Los actores y líderes religiosos pueden desempeñar un papel vital en la búsqueda de soluciones a las necesidades de protección de las personas desplazadas. También son defensores eficaces de una respuesta moral y humanitaria.
ACNUR espera avanzar en nuestro trabajo con los grupos religiosos en la comunidad. Como ha demostrado el asombroso costo humano y económico del desplazamiento interno, debemos adoptar un enfoque más colaborativo mediante la participación de todos los sectores de la sociedad”.