El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados pide seguridad para los civiles atrapados en Idlib
Ante el rápido deterioro de la situación en la provincia siria de Idlib, donde cerca de un millón de personas se encuentra en grave peligro, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, apoya el llamamiento al cese de las hostilidades y pide actuar con urgencia para que las personas atrapadas en el conflicto puedan desplazarse a lugares seguros.
Se estima que en los últimos meses más de 900.000 personas han huido de sus hogares o lugares de refugio en Idlib. La mayoría se encuentran ahora al norte de las gobernaciones de Idlib y de Alepo, lo que agrava una situación humanitaria ya de por sí catastrófica en medio de temperaturas extremadamente frías.
“Necesitamos que cesen los enfrentamientos y que se pueda acceder a zonas seguras para salvar vidas”, declaró el Alto Comisionado. “El Secretario General de Naciones Unidas ha pedido a las partes en conflicto que respete el derecho de la guerra. Cada día que pasa, este llamamiento resulta más urgente. No puede ser que miles de personas inocentes sufran las consecuencias de las divisiones de la comunidad internacional. El hecho de que no se logre encontrar una solución a esta crisis pesará sobre nuestra conciencia internacional colectiva”.
“Como en momentos de crisis anteriores, también hago un llamamiento a los países vecinos, incluyendo a Turquía, para que amplíen las admisiones de forma que las personas que se encuentran en mayor situación de peligro puedan llegar a un lugar seguro, a pesar de que somos conscientes de que las capacidades y el apoyo público ya están sometidos a una gran presión”, añadió Filippo Grandi. “El apoyo internacional a estos países, que ya acogen a 5,6 millones de refugiados, de los cuales 3,6 se encuentran en Turquía, debe mantenerse e incrementarse”.
Se estima que actualmente más de 4 millones de civiles se encuentran en el noroeste de Siria. Más de la mitad son desplazados internos. Muchas de estas personas llevan años viviendo en situación de desplazamiento y se han visto obligadas a huir en varias ocasiones. Cerca del 80% de las nuevas personas desplazadas son mujeres, niños y niñas, y muchas personas mayores también se encuentran en una situación de riesgo.
Las Naciones Unidas y otras organizaciones socias, tanto en Siria como en otros lugares, llevan semanas trabajando para ayudar a las personas desplazadas en la región de Idlib. Debido a la intensidad y a la magnitud de los desplazamientos, las necesidades en materia de alojamiento son críticas. La dureza del invierno -con nevadas, inundaciones y temperaturas bajo cero-, unida a la subida del precio del combustible, agrava el sufrimiento y empeora una situación ya complicada.
Las organizaciones humanitarias están tratando de llegar a la población por todos los medios posibles, incluso a través del envío de cargamentos de refugios y materiales de ayuda desde la frontera con Turquía. Los socios locales en el terreno están haciendo todo lo posible para continuar ofreciendo apoyo psicosocial, asesoría jurídica y asistencia, así como para seguir ayudando a las personas en situación de vulnerabilidad a que accedan a los servicios básicos. No obstante, muchos de estos socios locales también se están viendo atrapados en la situación de inestabilidad.
Debe garantizarse el acceso humanitario seguro y la seguridad de los trabajadores humanitarios. ACNUR está enfocado en ayudar a más de 257.000 personas (55.000 familias) con artículos de primera necesidad, así como en asistir a otras 84.000 personas (14.000 familias) en el interior de Idlib proporcionándoles alojamiento. Asimismo, la organización ha almacenado provisiones de material humanitario en la región para satisfacer las necesidades inmediatas de hasta 2,1 millones de personas, incluyendo tiendas de campaña para 400.000 personas.
“Siendo claro, como agencias humanitarias estamos haciendo todo lo posible para salvar vidas, pero el espacio para llevar a cabo estos esfuerzos es cada vez más reducido. Ante tanto sufrimiento, la ayuda humanitaria no puede ser la única respuesta”.
Para más información sobre este terma, por favor contactar:
- En Amán, Rula Amin, [email protected], +962 (0)790 04 58 49
- En Amán, Andreas Kirchhof, [email protected], +962 791 825 473
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