'Debemos creer que podemos hacer la diferencia y podemos hacer las cosas mejor' - Andrew Harper
ACNUR cuenta con casi 11.000 trabajadores, la mayoría de los cuales están en el terreno. Conoce a Andrew Harper, quien lidera programas innovadores de ayuda a las personas refugiadas en todo el mundo.
Nombre: Andrew Harper, de Australia.
Título del trabajo: ACNUR, Director de Programas, con sede en Ginebra.
Misiones del ACNUR: Timor Occidental, Ucrania, Albania, Irán, Iraq, Jordania y en la sede en Ginebra.
Usted recién ha estado en Uganda, donde miles de refugiados congoleños han huido de los combates en la República Democrática del Congo. ¿Qué vio?
Los refugiados llegaban a través del Lago Alberto en barcos desde la República Democrática del Congo.
Creo que no he visto antes una situación donde las personas se hayan visto obligadas a huir por barco, teniendo tan poco dinero y gente para apoyarlos.
Trajeron con ellos todo lo que tenían. Han cargado los barcos con los restos de su iglesia, sus cabras, sus sillas de plástico, sus mantas, sus almohadas. Trajeron sus cabras para venderlas y poder enviar el dinero de vuelta con el fin de que sus hermanos, sus hermanas, sus tías y tíos pudieran coger otro barco para venir, ya que no tienen dinero.
¿Cómo consigues permanecer optimista dado el creciente número de refugiados y de las atrocidades que has visto?
No tenemos otra opción. Tenemos que serlo porque la gente está esperando que seas positivo sobre el resultado. Los refugiados están en una situación bastante difícil, así es. Somos afortunados de estar en una posición donde somos capaces de ayudar a los demás e influir en algo para hacer el bien. Pero nunca estamos contentos con el resultado. Siempre debemos seguir trabajando para hacer las cosas mejor.
"Siempre hay que trabajar para lograr algo mejor".
Creo que cada situación proporciona una oportunidad. Por ejemplo, es obvio que Uganda por el momento es un gran desafío, pero que nos está dando la oportunidad para realizar el registro biométrico de los refugiados, basado en la exploración del iris. Este es uno de los objetivos principales para nosotros a nivel mundial ahora.
¿Por qué es tan importante el escaneo del iris de los refugiados?
Antes, todo dependía de las tarjetas de racionamiento, papeles que los refugiados llevaban con ellos para identificarse. Pero si los refugiados se trasladaban solían venderlos o regalárselos a alguien. Lo que hacemos ahora es una nueva técnica con la que podemos identificar a cada refugiado escaneando sus ojos. Simplemente con una cámara y tomando una instantánea de sus ojos.
Para un refugiado a veces es un poco difícil tener documentos encima porque a veces se los quitan. Ahora ya tienen siempre esta identificación. Pueden ir a cualquier lugar y probar que son ellos.
Usted era representante de ACNUR en Jordania durante el apogeo de la crisis Siria. Fueron los encargados de mover un gran número de sirios desesperados hacia zonas seguras. ¿A qué desafíos se enfrentó?
En el punto más álgido del conflicto, creo que estábamos llevando 80 autobuses de refugiados cada noche al campamento de Za'atari. Esto es mucho. Lo que significó que tuviéramos que poner tiendas de campaña durante el día y durante la noche para que el sistema funcionase.
Nuestro objetivo era mover a la gente lejos de la frontera tan pronto como fuera posible apoyados por las fuerzas armadas jordanas y situarlos en un lugar donde pudieran estar seguros, lo cual hicimos. Nadie querría eso, pero creo que el equipo allí y el pueblo jordano hizo lo pudo ante esa situación.
¿Qué sientes cuando ves a los niños en esta situación?
¿Sabes? Lo que realmente mueve mi corazón son los padres, porque los niños siempre buscan a sus padres a salir de las dificultades. Y en estas situaciones los padres realmente no pueden proteger a sus hijos. Y ves a las madres que simplemente no saben qué hacer.
Generalmente los niños realmente son mucho más resistentes. Se adaptan, pero ¿cómo potenciamos más los padres? ¿Cómo volvemos a dar un sentido al futuro de esos padres?
Eres activo en Twitter y la forma en que te describes a ti mismo es como innovador, que detestas el pesimismo y las reuniones interminables.
¿No le pasa a todo el mundo? Creo que nuestro papel tiene que ser el de creer que podemos marcar la diferencia y que podemos hacer las cosas mejor, porque si no lo creemos nosotros mismos ¿qué esperanza les vamos a dar a los refugiados?
Gracias al Voluntario En Línea Eduardo Corral Pugnaire por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.