El ensayo de un fotógrafo de ACNUR sobre mujeres refugiadas congoleñas gana un prestigioso premio
Los deslumbrantes retratos de Giles Duley consiguieron el premio de Amnistía Internacional sobre periodismo.
LONDRES – En una ceremonia anual en Londres, el fotógrafo humanitario Giles Duley ganó el prestigioso Premio de Amnistía Internacional para los medios por su poderosa serie que plasma las dificultades y la resiliencia de las mujeres refugiadas congoleñas en Angola.
Su poderoso ensayo fotográfico “Estamos aquí porque somos fuertes”, fue encargado por ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, y posteriormente publicado por la Revista Humanity.
Duley ha sido colaborador del ACNUR por mucho tiempo y sus proyectos anteriores para la agencia incluyen la documentación de la llegada de refugiados sirios a Grecia en 2015. Desde entonces estableció su fundación, Legacy of War, la cual busca empoderar a las comunidades y a las personas a reconstruir sus vidas después del conflicto.
“Realmente agradezco trabajar con ACNUR, que me encomió este proyecto. Siempre me han ofrecido el lujo de la libertad creativa. Su confianza en mi trabajo durante todos estos años me ha permitido crecer como fotógrafo y narrador”, dijo Duley al recibir la noticia de su premio mientras estaba en una misión anti-minas terrestres en Vietnam.
“Bailamos, comimos e hicimos retratos”.
Los retratos a blanco y negro de Duley son fuertes, capturando el dolor de la ordalía de estas mujeres, así como las reservas internas que de alguna manera ellas encontraron. Sirven como recordatorio del atroz abuso sexual que sufren las mujeres durante los conflictos en todo el mundo. En un asentamiento del ACNUR en Lóvua, lugar donde se tomaron los retratos, el 75 por ciento de las personas congoleñas refugiadas son mujeres, niñas y niños.
Los sujetos de su proyecto se vieron obligadas a huir de la región de Kasai en la República Democrática del Congo después del estallido de la violencia en marzo de 2017, que detonó el desplazamiento masivo. Más de 34.000 refugiados huyeron también a la Provincia de Luanda Norte, al noreste de Angola, donde encontraron el apoyo del ACNUR y sus socios.
“Muchas de las personas refugiadas son mujeres y niñas, que relataron las horribles historias de abuso durante su huida. Los refugiados llegaban en terribles condiciones, algunos con heridas de machetes, hambrientos, exhaustos y traumatizados”, dijo Philippa Candler, Representante del ACNUR en Angola.
El fotógrafo quedó impactado por el espíritu generoso de las mujeres. “Bailamos, comimos y e hicimos retratos. Realmente ha sido la sesión de fotografías más memorable de mi vida”, dijo él. “Resiliencia es una palabra que se usa con demasiada facilidad, pero con Tía Rose y Mimi, y después con todas las mujeres que conocí en el campamento, realmente encontré el sentido de la palabra”.
Los premios de Amnistía celebran la excelencia en el periodismo de derechos humanos, así como el coraje y la determinación de los periodistas y los editores que ponen sus vidas en la línea de frente para contar historias de derechos humanos de relevancia. La ceremonia se llevó a cabo el miércoles en el centro BAFTA en Londres.
El agente de Duley, Edson Williams, aceptó el premio en su nombre. Williams agradeció al ACNUR por darle a Duley, quien posteriormente recaudó 100.000 dólares para apoyar a las mujeres, la oportunidad de resaltar el problema. “Giles daría este premio a las mujeres”, dijo Williams.
Entre los otros ganadores se encontraban Wa Lone y Kyaw Soe Oo, reporteros de Reuters encarcelados en Myanmar acusados de violar la Ley de Secretos Oficiales. Trabajaron en una investigación innovadora sobre el asesinato de 10 hombres y niños musulmanes rohingya por fuerzas de seguridad y civiles budistas en el estado de Rakhine durante una represión de agosto de 2017.