ACNUR ayuda a miles de refugiados congoleños que regresan a sus hogares desde Angola
Miles de refugiados congoleños están regresando desde Angola a la región de Kasai en la República Democrática del Congo (RDC), donde se han reducido los enfrentamientos entre los grupos armados y han mejorado las condiciones de seguridad.
El primer grupo compuesto por unos cientos de personas regresará en el marco de una repatriación voluntaria que comenzará oficialmente esta semana, tras la firma el pasado 23 de agosto de un acuerdo tripartito entre ACNUR y los gobiernos de Angola y la República Democrática del Congo sobre el retorno voluntario.
En total, se espera que más de 4.000 refugiados reciban asistencia para regresar a sus hogares en las próximas semanas. ACNUR está proporcionando a los repatriados asistencia con el transporte, así como ayuda económica en efectivo para su reintegración.
Por otra parte, desde el 18 de agosto unos 12.000 refugiados congoleños, incluidos cerca de 7.000 niños y niñas, regresaron espontáneamente a sus hogares desde el asentamiento de Lovua, en la provincia angoleña de Lunda Norte. ACNUR agradece a las autoridades angoleñas el haber proporcionado rápidamente a los retornados camiones para ayudarlos en su viaje de regreso a la RDC.
Muchos de quienes regresan espontáneamente tienen que hacer frente a condiciones de vida extremadamente difíciles. ACNUR les proporciona asistencia económica en efectivo, así como ayuda humanitaria en colaboración con las autoridades provinciales y las ONG socias, en la ciudad fronteriza de Kalamba Mbuji, donde ACNUR ha establecido un centro de tránsito de emergencia.
También se brinda una asistencia similar a los repatriados llegados a Kananga, la capital de la provincia de Kasai central.
Si bien se han reducido los enfrentamientos entre los grupos armados, algunos refugiados aún desconocen cuáles serán las condiciones en las que se encontrarán sus hogares. Algunos no están dispuestos a regresar a sus hogares y se están instalando en otros lugares por temor a posibles nuevos estallidos de violencia interétnica.
Las infraestructuras públicas, como escuelas y centros de salud, han sufrido graves daños a lo largo de los múltiples períodos de enfrentamientos y aún están pendientes de ser reparadas. Las instalaciones existentes carecen de la capacidad para satisfacer todas las necesidades de los repatriados.
ACNUR continúa apoyando los esfuerzos del Gobierno de la RDC para proporcionar y restaurar los servicios básicos, así como para promover la cohesión social y los esfuerzos para la reintegración. ACNUR, a través de su socio War Child UK, también está llevando a cabo un seguimiento en materia de protección en Kananga y sus alrededores para identificar las preocupaciones de protección y garantizar respuestas adecuadas.
Sin embargo, se necesita un apoyo económico masivo por parte de la comunidad internacional a las organizaciones humanitarias y el Gobierno de la República Democrática del Congo, para que se creen unas condiciones sostenibles para los repatriados.
Los niveles actuales de financiación están muy por debajo de la cantidad necesaria para permitir la puesta en marcha de un programa de reconstrucción de esta envergadura. Para 2019, ACNUR apenas ha recibido el 57% de los 150 millones de dólares necesarios para ayudar a las personas afectadas por la crisis en la RDC.
Para más información, por favor contactar:
- En Ginebra, Charlie Yaxley, [email protected], +41 79 580 8702
- En Ginebra, Babar Baloch, [email protected], +41 79 513 9549
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