Omar

24 años | Somalia
Omar / 24 años / Somalia

 

Refugiado somalí en Colombia

"En mi país, desde el año de 1990 no teníamos gobierno. Sólo había "señores de la guerra", así como partidos que imponían sus propias reglas e ideas políticas. Si tú no los apoyabas, simplemente te mataban. En el año 2005, los miembros de esos grupos le dijeron a mi padre que mi hermano y yo debíamos unirnos a ellos y tomar las armas. Mi padre estaba tratando de llevarnos a estudiar a un colegio privado, para que tuviéramos mejor futuro. Por eso, les respondió que todavía éramos muy pequeños para hacerlo. . Después, él nos llevó a mí y a mi hermano a otra provincia. Cuando los "señores de la guerra" se dieron cuenta, llegaron una noche a la casa y lo mataron. Luego asesinaron a mi hermano y a mí me arrestaron, diciéndome que en tres meses tomarían la decisión de matarme o de obligarme a pelear con ellos.

Un día, cuando nos estaban llevando a un campamento, una bomba explotó a nuestro paso y destrozó mi codo izquierdo. Algunas personas me auxiliaron junto a otro herido, y nos llevaron a una zona cercana a la frontera con Kenia. Allí estuvimos alrededor de seis meses. Pasó un tiempo, y decidí huir desde Somalia a Panamá, en un  barco destartalado y tripulado por traficantes, escondido en las bodegas con 10 personas más. El viaje me costó mil quinientos dólares. Así llegué a Colombia en 2009".

Con el apoyo de ACNUR y la Pastoral Social, Omar encontró refugio en el albergue del barrio El Campín en Bogotá. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia ya le otorgó el estatus de refugiado. Por ello, ahora está trabajando y ha empezado su vida de nuevo, intentando olvidar todo lo vivido.

Pocos se han puesto en los zapatos de Omar. Pocos han sufrido el dolor de perder a su familia a manos de la violencia.
Ponerte en los zapatos de Omar es el primer paso para trabajar por la tolerancia y la paz.