Angelina Jolie hace un llamado a un mayor apoyo internacional para los refugiados venezolanos en Perú
La Enviada Especial del ACNUR visitó Perú para evaluar las necesidades humanitarias de los refugiados venezolanos y quienes les acogen.
La Enviada Especial del ACNUR, Angelina Jolie, visita un comedor local en Tumbes, Perú.
© ACNUR/Santiago Escobar-Jaramillo
Fuera del edificio blanco y azul donde se llevan a cabo los trámites de migración, las familias venezolanas acampan bajo los árboles o donde pueden encontrar algo de sombra.
Aquí hay grupos de personas en todas partes, sentados alrededor de sus pertenencias, bolsas de mano y maletas apiladas. Las carpas blancas grandes funcionan como clínicas, guarderías, centros de vacunación y puntos de información. Los adultos y los niños comen y duermen al aire libre o en los pasillos, mientras esperan para solicitar asilo en Perú.
Desde agosto de 2018, Tumbes, una ciudad fronteriza calurosa y polvorienta en la árida costa norte de Perú, ha visto la llegada de decenas de miles de refugiados y migrantes venezolanos. Actualmente, unos 2.000 cruzan desde el Ecuador todos los días.
La Enviada Especial de ACNUR, Angelina Jolie, estuvo allí esta semana, para presenciar la situación humanitaria, durante una visita oficial a Perú en nombre del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, quien visitó a Tumbes a principios de este mes.
- Ver también: Los permisos temporales de permanencia representan una línea de vida para los venezolanos en Perú
Perú es uno de los países más afectados por el aumento de la llegada de refugiados y migrantes venezolanos en los últimos tres años, el mayor movimiento de personas en la historia reciente de América Latina.
“Escuché historias sobre personas que han muerto por la falta de atención médica y de medicinas".
En Tumbes, Jolie visitó a las Hijas de Santa Ana, quienes convirtieron su convento en un comedor de beneficencia, donde cientos de mujeres, niños y hombres pueden comer al menos una comida caliente al día. También visitó el puesto fronterizo binacional y un albergue para refugiados y migrantes venezolanos en la capital peruana, Lima. Ella habló con muchos refugiados que le contaron las razones por las cuales tuvieron que salir de Venezuela.
“Escuché historias sobre personas que han muerto por la falta de atención médica y de medicinas: pacientes de cáncer cuya quimioterapia fue detenida abruptamente, pacientes con diabetes sin acceso a insulina, niños y niñas sin poder recibir antibióticos básicos, personas muriendo de hambre, así como trágicas historias de violencia y persecución”, dijo Jolie a los periodistas en una conferencia de prensa en Lima.
Durante su estancia en Perú, la Enviada Especial del ACNUR se reunió con el Presidente del país, Martín Vizcarra, así como con representantes del Gobierno y organizaciones que contribuyen a la respuesta humanitaria.
“Le dije al Presidente Vizcarra cuánto aprecia el ACNUR los pasos que ha tomado Perú para ayudar a los venezolanos a tener una condición legal y acceso a servicios básicos”, dijo Jolie. “Y discutimos los esfuerzos regionales que se están llevando a cabo en el proceso de Quito, que es un primer paso hacia una solución regional. También hablamos sobre qué más puede y debe hacer la comunidad internacional para apoyar a Perú y sus vecinos”.
“Es crucial reforzar el estado de derecho, el respeto de los derechos humanos, la protección internacional y los sistemas de asilo”.
También conoció a varias personas jóvenes, incluido un grupo de breakdance que trabaja para inspirar a los jóvenes y crear vínculos con la comunidad local a través de la danza y la cultura. Visitó proyectos que brindan protección y asistencia a solicitantes de asilo, refugiados y familias de acogida, y observó la generosa respuesta de Perú a los refugiados y migrantes venezolanos.
“En un momento en el que se cuestionan los principios fundamentales, es más importante que nunca que tengamos los sistemas y los recursos establecidos para identificar a las personas con solicitudes de asilo genuinas, y para asegurarnos de que tengan el apoyo que necesitan”, dijo la Enviada Especial. “Es crucial reforzar el estado de derecho, el respeto de los derechos humanos, la protección internacional y los sistemas de asilo”.
La Enviada Especial se centra en las principales crisis de desplazamiento, representando al ACNUR y al Alto Comisionado a nivel diplomático. La Enviada Especial Jolie visitó América Latina por última vez en 2012, para una misión a Ecuador, su tercera visita para conocer a los refugiados colombianos en la región.