Alto Comisionado pide un mayor apoyo internacional para Tanzania
Al concluir su visita de cuatro días al país de África del Este, Filippo Grandi urgió aumentar la inversión en las regiones del noroeste, que acogen a 330.000 personas refugiadas.
Dar es Salaam - El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, terminó su visita de cuatro días a Tanzania con un llamado a una mayor inversión en las regiones del noroeste, donde se alojan unos 330.000 refugiados. Esto incluye prioridades como la protección del medio ambiente y el desarrollo económico. Al mencionar a Tanzania como “uno de los principales países de asilo de refugiados de África”, el Sr. Grandi expresó su satisfacción con las garantías del Gobierno de que el país continuará siendo hospitalario con los refugiados.
En su reunión con el Presidente John Joseph Magufuli, el Sr. Grandi encomió a Tanzania por su larga tradición de acoger refugiados que huyen del conflicto y la persecución en los países vecinos, incluyendo la naturalización de 162.000 refugiados burundeses de 1972. Al citar la hospitalidad de Tanzania durante décadas con las personas que necesitan protección, dijo que el país y su gente merecen un mayor reconocimiento internacional.
Grandi se comprometió a movilizar más apoyo para los esfuerzos humanitarios y así como para el desarrollo de la comunidad de acogida, y para mejorar la seguridad de los campamentos y los proyectos ambientales, como las fuentes de energía que ofrecen una alternativa a la leña. Igualmente discutieron la idea de establecer un marco regional para trabajar en mejorar vidas y encontrar soluciones para los refugiados burundeses y congoleños.
“Es importante que nadie se vea obligado a regresar”.
En sus reuniones con funcionarios del gobierno, el Sr. Grandi observó que el retorno sostenible de los refugiados ocurre cuando los refugiados sienten que es seguro regresar a casa y reciben el apoyo necesario para hacerlo. En los últimos dos años, 57.865 refugiados de Burundi han recibido asistencia para regresar voluntariamente de Tanzania. Sin embargo, algunos refugiados informan que la presión percibida de los funcionarios del gobierno junto con las restricciones a la libertad de movimiento y el acceso a oportunidades de medios de vida han influido en su decisión de regresar.
El Sr. Grandi señaló en sus reuniones que ACNUR está preparado para trabajar con el gobierno para ayudar a todos aquellos que manifiestan un deseo de regresar a casa, pero que, según su experiencia, algunas restricciones pueden ser contraproducentes y que es cuando los refugiados están convencidos de que las condiciones son seguras en sus países de origen que elegirán regresar voluntariamente.
“Las condiciones aún son inciertas tanto en la República Democrática del Congo como en Burundi”, dijo Grandi a la prensa tras su visita al campamento de refugiados de Nyarugusu en Kasulu, y señaló que, sin embargo, algunos refugiados se ofrecen como voluntarios para regresar y recibir apoyo del ACNUR. “Es importante que nadie se vea obligado a regresar, que la repatriación siga siendo un ejercicio voluntario”. El Sr. Grandi pidió más apoyo internacional para garantizar que los refugiados que regresan voluntariamente puedan reintegrarse con éxito en sus países de origen, señalando que los actuales paquetes de retorno y la capacidad de seguimiento de los retornados en Burundi son insuficientes.
El Sr. Grandi destacó que Tanzania es un país estable en una región con problemas y felicitó al país por su papel como pacificador regional, instando a los líderes de Tanzania a continuar los esfuerzos de paz. En una reunión en Dar es Salaam con el ex presidente de Tanzania, Benjamin William Mkapa, quien recientemente se desempeñó como Facilitador de la Comunidad Africana Oriental para el Proceso de Diálogo Inter-Burundiano, el Sr. Grandi expresó su esperanza de que los esfuerzos de mediación continúen. El Sr. Mkapa mencionó la preocupación de que el proceso se encuentra estancado y, aunque se lograron avances en el área de la seguridad, sigue habiendo un callejón sin salida. El diálogo entre las partes interesadas es la única salida de la crisis actual y hacia elecciones libres, justas e inclusivas planeadas para 2020.
El 74 por ciento de los refugiados y solicitantes de asilo en Tanzania son de Burundi, y el 26 por ciento restante de la República Democrática del Congo. La gran mayoría vive en campamentos cerca de las zonas fronterizas, y muchos han estado allí durante décadas.
El Sr. Grandi elogió a Tanzania por apoyar el Pacto Mundial sobre Refugiados, un enfoque que exige un mayor apoyo internacional para los países de acogida. También pide mayor autosuficiencia para los refugiados, que estimula las economías locales y brinda oportunidades para las comunidades de acogida, dijo. Durante su visita al campamento de refugiados de Nyarugusu, el refugiado congoleño Selemani Boaz, comerciante en el mercado, comentó: “El mercado común nos ayuda a interactuar con diferentes personas, incluso de fuera del campamento, especialmente tanzanos... Nos conocemos y esto ayuda a unirnos”. El mercado también permite a los refugiados acceder a una variedad de alimentos, más allá de las raciones del Programa Mundial de Alimentos.