En Italia, una beca ofrece una nueva oportunidad a un refugiado sursudanés

Boboya Emmanuel Sebit Gabu asiste a una lección de economía con sus compañeros en el Adriatic College, ubicado en Duino, cerca de Trieste.  © ACNUR/Fabio Bucciarelli

DUINO, Italia – En lo alto de un acantilado con vista al Adriático, Emmanuel, de 18 años, se sienta en una roca para hacer su tarea de economía bajo el sol de la tarde. En Sudán del Sur la guerra ensombreció su niñez y sus oportunidades de educarse, pero ahora está poniéndose al día académicamente y sacando el mayor provecho a una beca para UWC (United World College) Adriatic College en Duino, cerca de Trieste.

"Aquí hay una sensación de libertad", dice, extendiendo sus brazos. "Un ser humano es como un árbol. Cuando estás en un mal ambiente tu persona y tus pensamientos se achican, pero en un lugar bueno, te expandes".

UWC Adriatic es una de 17 universidades y colegios que UWC ha establecido en todo el mundo y donde se enseña el Bachillerato Internacional (IB, por sus siglas en inglés). Fundada en 1962, UWC es una organización laica que tiene la misión de hacer de la educación una fuerza que una a las personas, las naciones, y las culturas por la paz y por un futuro sostenible. Este año, la Iniciativa para los Refugiados del UWC, apoyada por la Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, espera aumentar a más del doble el número de becas que ofrece actualmente a los refugiados, de 47 a al menos 100.

La cooperación entre ACNUR y UWC es un ejemplo del tipo de nuevas alianzas que se necesitan para promover una respuesta integral, para alcanzar una mejor protección y soluciones duraderas para los refugiados, y para ampliar las opciones disponibles a aquellos refugiados con pocas perspectivas de obtener una solución duradera.

ACNUR espera que la Iniciativa para los Refugiados del UWC pueda crecer hasta servir a un número mayor de estudiantes que los 100 que se beneficiarán inicialmente de las universidades y colegios UWC. La educación es crucial para que los jóvenes refugiados construyan su futuro, sean autosuficientes, proporcionen liderazgo durante el desplazamiento y reconstruyan las comunidades que se están recuperando de conflictos, incluyendo las áreas de retorno y los países de acogida.

Al igual que sus escuelas hermanas, ubicadas en cuatro continentes, UWC Adriatic sigue una política de "diversidad deliberada" que reúne a estudiantes de todo el mundo. En la actualidad cuenta con 188 estudiantes (de los cuales 10 son refugiados) provenientes de más de 80 países, quienes cursan el programa IB de dos años. Más del 70 por ciento de los estudiantes tienen una beca completa o parcial.

"Buscamos a jóvenes líderes en potencia y a estudiantes persuasivos que van a salir al mundo a hacer la diferencia", dice el director Mike Price. "En UWC Adriatic, nosotros ponemos el escenario y dejamos que los estudiantes pongan la diversidad".

Emmanuel está cursando el primer semestre de su primer año en UWC Adriatic. Su beca es cortesía de Anna Illy, de la famosa compañía italiana de tostado de café Illy, quien ha venido a la universidad a conocer a Emmanuel por primera vez. Se sientan en un café, bebiendo en pequeñas tazas, antes de que sea hora de que Emmanuel vaya a su clase de inglés.

Emmanuel habla inglés con fluidez, y también habla árabe y su lengua nativa moru. Creció en Yambio, en Sudán del Sur. Cuando todavía asistía a la escuela primaria huyó del conflicto, y se volvió una persona desplazada interna en su propio país, como millones de otros. Más tarde se convirtió en huérfano, aunque no quiere hablar acerca de su niñez. Los recuerdos son demasiado dolorosos.

"Una persona puede perder la esperanza, pero tienes que creer en lo que haces."

Después de asistir a la escuela secundaria en Bahr Naam, condado Maridi, Emmanuel se mudó a la capital, Yuba, pero se encontró con feroces batallas entre las fuerzas del Gobierno y las fuerzas rebeldes. Huyó a Uganda, convirtiéndose en uno de más de un millón de refugiados de Sudán del Sur acogidos por el país vecino. Su hermana mayor Raile también huyó a Uganda por su cuenta. Milagrosamente, se encontraron en el campamento de refugiados en Bweyale.

Un amigo de Sudán del Sur llamado Peter le habló a Emmanuel acerca de la beca UWC. Peter era demasiado mayor para aplicar, pero alentó a su joven amigo a que lo hiciera. "Peter tiene un corazón bondadoso", dice Emmanuel. "Éramos muy unidos, y cuando me enfrenté a dificultades, él fue como un hermano para mí".

Pero Emmanuel tuvo que tomar un gran riesgo al abandonar la protección que le habían brindado en Uganda para volver a su país a participar en las entrevistas de la beca UWC en Yuba. "Paso casi todo el tiempo rezando", dice. "Una persona puede perder la esperanza, pero tienes que creer en lo que haces".

Fue seleccionado por el Comité Nacional UWC de Sudán del Sur entre 19 candidatos. Quizás el factor decisivo fue su ensayo de 400 palabras acerca de la guerra, o quizás fue su trayectoria de servicio como un Pathfinder (el equivalente de un Boy Scout) en la iglesia adventista.

Emmanuel se ha adaptado bien a UWC Adriatic. Comparte un cuarto con un estudiante ucraniano, y su mejor amigo es un muchacho japonés.

"Todo era nuevo", dice Emmanuel. "El clima; el paisaje; las personas, tan agradables y cálidas. Aquí veo las cosas de forma diferente".

Emmanuel está estudiando economía, filosofía y biología. También matemáticas, italiano e inglés como asignaturas secundarias. Después de sus clases matutinas y tras un almuerzo rápido en la cafetería, el tope del acantilado es un lugar tranquilo donde hacer su tarea al aire libre.

Los árboles aquí le recuerdan a su vieja escuela en Sudán del Sur. Admite sentirse nostálgico. "Vengo aquí para aclarar mi mente, para escuchar canciones en mi teléfono y para cantar. Extraño a mi hogar. He perdido a viejos amigos. Pero la vida no es una elección. Es acerca de dónde te encuentras".

Economía es la asignatura que Emmanuel espera lo lleve a la universidad tras completar el IB, quizás a Europa y luego de vuelta a Sudán del Sur. Está decidido a volver y hacer la diferencia para su pueblo.

Por Helen Womack

Gracias a la Voluntaria en Línea Maria Brandt por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.