Grandi elogia el trato "modelo" que Uganda da a los refugiados e insta a los líderes regionales a construir la paz
Alto Comisionado recalca que las comunidades de acogida deben beneficiarse de la presencia de los refugiados con mejoras en la infraestructura.
ASENTAMIENTO DE REFUGIADOS IMPEVI, Uganda – Al renovar el fuerte llamamiento a los líderes regionales para la construcción de la paz, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi, elogió la política de "fronteras abiertas" mantenida por Uganda, con la cual recibe a diario hasta a 500 personas refugiadas.
Grandi actualmente está realizando una visita oficial al país del Este de África, que ahora ofrece protección a cerca de 1,4 millones de refugiados. Él aprovechó para confirmar el trato que da Uganda a quienes huyen de las guerras y la persecución como un modelo para el resto del mundo.
"Quiero agradecer al Gobierno de Uganda, al gobierno local y a su pueblo . . . porque a pesar de los recientes flujos, Uganda mantiene la política de asilo más progresiva en África, incluso en todo el mundo", dijo Grandi a los periodistas después de recorrer el asentamiento de refugiados.
"Uganda mantiene la política de asilo más progresiva en África, incluso en todo el mundo."
Impevi y el campamento vecino, Rhino, están ubicado en el distrito de Arua, y ahora brinda un hogar temporal a cerca de 245.000 refugiados, principalmente de Sudán del Sur.
"Casi 500 personas entran a diario a Uganda . . . Todas ellas pueden venir y recibir protección, pueden mezclarse libremente, trabajar, acceder a servicios básicos, las fronteras están abiertas; su política de asilo es una de las más progresivas del mundo", dijo él.
La mayoría de los refugiados ha llegado al Norte de Uganda huyendo del conflicto en Sudán del Sur, pero un número que crece constantemente también huye de la inseguridad en la República Democrática del Congo hacia su frontera Oeste. Uganda también acoge a cerca de 50.000 refugiados de Burundi.
Ahora Uganda tiene la mayor población de refugiados en África, y más de la mitad de ellos son niños. Un cuarto de las personas que viven en el distrito de Arua son refugiados, mientras que en el vecino distrito de Yumbe, la mitad de la población es refugiada. Esto agrega una carga extra sobre los limitados recursos de las comunidades locales.
Grandi destacó que los refugiados en Uganda a menudo reciben parcelas para cultivar, se les permite trabajar y acceder a la educación, la salud y la justicia, sin embargo advirtió que no se puede tomar por sentada la generosidad de las comunidades de acogida, que enfrentan importantes desafíos de desarrollo.
"No deberíamos probar tanto la paciencia de las personas . . . Tenemos que asegurar que las comunidades locales se beneficien de la presencia de los refugiados", dijo él.
"Acoger refugiados puede ser beneficioso para las comunidades locales y los refugiados."
Él explicó que el ACNUR y el Gobierno de Uganda han adoptado una estrategia integral que apoya iniciativas que pretenden fomentar las relaciones armoniosas entre las personas nacionales y refugiadas.
Bajo estas políticas, las instalaciones, como las clínicas de salud y los pozos de agua, instaladas para apoyar la presencia de los refugiados están disponibles para las comunidades locales. Acoger refugiados puede ser beneficioso para las comunidades locales y los refugiados, explicó Grandi después de recorrer un nuevo pozo que proporcionará agua a todos los que viven en las inmediaciones.
A fines de esta semana, el ACNUR lanzará un llamamiento para obtener nuevos fondos para apoyar este enfoque de "integral de la sociedad", también conocido como el Marco de Respuesta Integral para los Refugiados, con una mayor inversión en infraestructura.
Grandi se reunió con varios refugiados, muchos de los cuales le dijeron que se irían a casa si había paz y seguridad, pero por el momento no era el caso. "Estamos confundidos, no hay paz allí. Nos iremos a casa si hay paz", dijo Sarah Utua, de 24 años. Ella caminó seis semanas a Uganda con sus padres ancianos y sus dos hijos para huir de los combates cerca de su casa.
"Todas estas personas quieren ir a casa . . . Quiero hacer un nuevo llamamiento a los líderes de Sudán del Sur para que por favor construyan la paz", dijo Grandi.
El Alto Comisionado se mostró conmovido con la historia de un hombre de su misma edad, que según le contó, ha sido refugiado en Uganda cuatro veces a lo largo de su vida.
"Quiero volver y asegurarme de que mi cuerpo terminé sus días allí. Esta es la cuarta vez que soy refugiado. Uganda ha sido muy buena conmigo, pero quiero volver a mi hogar", dijo Lasuba Yousto, de 60 años.
Grandi también se reunió con el Primer Ministro Ruhakana Rugunda, a quien le reiteró el agradecimiento del ACNUR por el enfoque que su país ha tenido para la situación de los refugiados y se comprometió a mantener y mejorar la cooperación con las autoridades en todas las áreas.
Por Jonathan Clayton