Emergencia en Mosul
Hombres, mujeres y niños iraquíes de las zonas que rodean las ciudades de Tikrit y Hawija se bajan del camión que llega al campamento de Debaga en Erbil Governate, al norte de Irak. Después de haber caminado durante horas fueron recogidos por las fuerzas kurdas cerca del puesto de control Debaga. Muchos dijeron que habían huido a causa de los ataques aéreos que han aumentado en los últimos días. © ACNUR/Ivor Prickett
Wissam Khadim y su familia que son desplazados internos se preparan para conocer al Alto Comisionado del ACNUR, Filippo Grandi en el refugio que ellos han hecho su hogar.
El campo de Al-Khadra inaugurado en marzo de 2015 sobre las afueras de Bagdad y sus alrededores alberga a 120 familias que huyeron de Ramadi y Faluya. Con una operación militar para retomar Mosul a partir de octubre de 2016, 11 nuevos campos se están construyendo para dar cabida a algunos de los anticipados 1 millón de personas podrían ser desplazadas. © ACNUR/Ivor Prickett
Las operaciones militares iraquíes en el corredor de Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak, se han realizado ya por varios meses. Desde mayo, más de 180.000 personas han sido desplazadas para huir de los combates.
El presupuesto de respuesta del ACNUR para la emergencia de Mosul es de $196,2 millones de dólares, y hasta la fecha el ACNUR solo ha recibido el 48% (US$ 95 millones) de los fondos necesarios para responder a la emergencia y continúa haciendo un llamado a los donantes para recibir ayuda adicional. De acuerdo con Grandi, los fondos son necesarios no sólo para una preparación inicial, sino también para el desplazamiento que podría continuar durante el invierno.
“Es probable que las personas que se desplazan no se quedarán por periodos cortos, sino que podría ser por varias semanas o meses, lo que se daría durante el invierno, así que es necesario que les brindemos un asistencia apropiada” , dijo Grandi, recalcando que por esto, conseguir el dinero resulta “urgente”.
En Irak, se están instalando 11 centros en preparación para un desplazamiento de larga escala desde Mosul, que según estimaciones de la ONU podría afectar hasta un millón de personas. Los campamentos tendrán una capacidad total de hasta 120.000 personas para finales de año, y además el ACNUR está preparando 30.000 tiendas de campaña adicionales y 50.000 kits para la construcción de refugios de emergencia para dar cobijo a las familias que huyen.
