El proyecto “Mejorando el acceso a la educación y la protección para los niños afectados por el conflicto colombiano (Colombia y Ecuador)” comenzó a implementarse en el 2013 por el Departamento de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). La realización de este proyecto ha sido posible gracias al apoyo de la Unión Europea, ganadora del Premio Nobel de la Paz 2012, que decidió donar parte del dinero del premio al ACNUR para la protección de miles de niños refugiados y desplazados colombianos que han huido del conflicto armado interno.
“Estamos encantados de que la Unión Europea haya decidido apoyar a las víctimas más vulnerables de una crisis que no llega a los titulares muy a menudo”, dijo el Alto Comisionado para los Refugiados, António Guterres. “La educación es una de las necesidades más apremiantes de los niños colombianos afectados por el conflicto, y es un importante gesto compartir este premio con ellos”.
Los colombianos siguen sufriendo los efectos de un conflicto armado que ha persistido durante décadas. Hay aproximadamente 4 millones de personas registradas oficialmente como desplazadas internamente en Colombia y decenas de miles de refugiados fuera del país, incluyendo más de 55.000 refugiados registrados en Ecuador. El 60% de ellos vive en zonas urbanas, mientras que el otro 40% reside en zonas de frontera, en áreas a menudo aisladas y con infraestructura poco desarrollada, donde el acceso a los servicios básicos puede ser muy limitado.
Del número total de refugiados reconocidos en Ecuador, 12.838 son niños y adolescentes. Ellos son particularmente vulnerables a los efectos del conflicto armado colombiano y necesitan especiales medidas de asistencia y protección. En Ecuador a menudo encuentran dificultades para proseguir sus estudios. Debido a los escasos recursos económicos pueden estar en la imposibilidad de adquirir uniformes y materiales escolares, mientras que la falta de los registros de Colombia puede representar un obstáculo a la hora de inscribirse a la escuela en el Ecuador.
En Colombia, según la Defensoría del Pueblo, los niños y adolescentes están en riesgo de ser reclutados forzosamente por parte de los grupos armados ilegales, lo que suscita graves preocupaciones con respecto a las tasas de abandono escolar. Las minas antipersonales y la presencia de cultivos ilícitos en determinadas zonas del país representan otros graves factores de riesgo. Los niños y adolescentes en Colombia pueden disfrutar de una mejor protección también gracias a actividades educativas y a la creación y mejora de espacios escolares protegidos, como medida de prevención del reclutamiento forzado y otros efectos del conflicto armado.
Gracias a la contribución de la Unión Europea es posible proporcionar apoyo educativo a 4.750 niños y adolescentes colombianos, incluyendo a 3.200 refugiados en Ecuador y a 500 niños y adolescentes pertenecientes a pueblos indígenas amenazados por el conflicto armado. El apoyo incluirá becas, entrega de uniformes escolares, materiales y actividades educativas y lúdicas. Además, se renovarán algunas escuelas en los barrios y zonas con más necesidades, beneficiando tanto a los niños desplazados como a los de las comunidades locales.
La UE fue el tercer mayor donante del ACNUR en 2012. Financia principalmente ayuda humanitaria centrándose en poblaciones vulnerables y apoyando especialmente a víctimas de las crisis olvidadas en el mundo. Al mismo tiempo, la UE apoya los objetivos del ACNUR a largo plazo tanto dentro como fuera de Europa, incluida la reintegración socioeconómica de los refugiados retornados, el desarrollo de los sistemas de asilo y el fortalecimiento de instituciones estatales para mejorar la asistencia gubernamental para desplazados y refugiados.