Pueblos indígenas

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En casi todas las regiones del mundo han existido o continúan surgiendo nuevas tensiones y conflictos interétnicos e interraciales. Estos conflictos suelen tener sus raíces en las luchas por el poder y se ven agravados por desigualdades socioeconómicas. Los grupos minoritarios nacionales, étnicos y religiosos suelen quedar desamparados en tales situaciones y en algunos casos, los miembros de comunidades indígenas se ven obligados a huir de sus países por miedo a ser perseguidos.

Por otra parte, muchas comunidades indígenas de diferentes partes del mundo han acogido a miles de refugiados que buscan seguridad. Las violaciones de los derechos humanos y el desplazamiento forzoso guardan relación entre sí. La subordinación social, política y económica de los pueblos indígenas en la mayoría de los países del mundo les hace vulnerables a las violaciones de los derechos humanos, y en muchos casos se han visto obligados a abandonar sus hogares y sus tierras debido a la persecución.

Por ejemplo, más de 200.000 guatemaltecos, la mayoría pertenecientes a pueblos indígenas, abandonaron su país a principios de 1980 huyendo de la guerra civil, las graves violaciones de derechos humanos y la campaña contra los insurrectos. Entre los refugiados más destacados de la historia figura Rigoberta Menchú, laureada con el premio Nobel de la paz, y cuya contribución a la causa de los derechos de los pueblos indígenas sigue siendo un ejemplo.

 

 

En el contexto del mandato de protección internacional de los refugiados confiado al ACNUR, los pueblos indígenas en su condición de grupo específico son personas de interés del ACNUR cuando son población refugiada o en riesgo de serlo. Se ha prestado especial atención a ciertas características de los refugiados indígenas en los programas de asistencia y repatriación, en particular a la relación especial que existe entre los refugiados indígenas y sus territorios patrios o su lugar de origen, a la estructura socioeconómica y cultural de la comunidad, y al deseo de mantener su propio idioma, su cultura y sus tradiciones, así como al sentido de autonomía durante su permanencia en campamentos y asentamientos para refugiados.

El ACNUR, como parte de las Naciones Unidas y con arreglo a su mandato, ha contraído un compromiso total de cooperar con el Relator Especial y con el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas.