Nadie debería huir de sus hogares por su orientación sexual o su identidad de género.
Sin embargo, en algunos países, muchas personas lesbianas, gay, bisexuales, trangénero o intersexuales (LGBTI) enfrentan discriminación, persecución y violencia a diario, y a menudo no tienen otra opción más que buscar asilo en otro lugar. Otros se encuentran paralizados por el miedo y sufren en silencio, aumentando su vulnerabilidad.
En el ACNUR trabajamos para proteger a las personas refugiadas y solicitantes de asilo LGBTI en cualquier lugar.
En décadas recientes, el número de refugiados y solicitantes de asilo LGBTI ha aumentado, con la mayoría de ellos calificando como “miembros de un determinado grupo social” bajo la Convención de 1951. Hoy, 77 países en el mundo penalizan las relaciones entre el mismo sexo y siete países las castigan con pena de muerte.