Josefina, ACNUR Buenos Aires
Eugenia se acercó a ACNUR al día siguiente de llegar a la Argentina. Arribó con 18 años recién cumplidos, sin ningún tipo de compañía o conocidos y sin saber hablar otro idioma que no fuera ruso. Después de intentar comunicarnos mediante señas, notas y gesticulaciones durante un largo rato, pasó a la oficina y estuvimos más de una hora, computadora de por medio, hablando mediante el traductor de google. Era una de las primeras entrevistas que mantenía con refugiados y fue todo un desafío, aunque finalmente pudimos entendernos y comenzar a darle una solución a su problema.
Texto: Josefina Aliberti