El colaborador de alto perfil del ACNUR, Jung Woo-sung viajó a Sudán del Sur para conocer a Samson, un refugiado sudanés de 21 años de edad que vive en el campamento de Ajuong Thok y que es un profesor y sueña con convertirse en periodista. Le mostró a Jung Woo-sung algunas de sus fotos e historias que ha escrito para destacar la situación de su pueblo y hablar de su propia historia.

Samson: “ACNUR me dio hace un año un teléfono inteligente y capacitación como periodista y fotógrafo. Éramos un grupo de 21 jóvenes y apasionados sudaneses que queríamos cambiar el mundo, nuestro mundo. Nos enseñaron cómo contar las historias de las personas y algunos trucos para tomar fotos convincentes. Me abrió los ojos y me ayudó a descubrir mi pasión. Quiero ser un periodista! Quiero contarle al mundo sobre lo que nosotros, los refugiados Nuba, hemos debido pasar a causa del conflicto en nuestro país. Quiero darle una voz a mi pueblo y contar lo que ellos ven- la mirada de los Nuba. Quiero que todos sepan que los refugiados no somos solo números. Antes que todo somos seres humanos. Tenemos talentos y sueños. Vivimos momentos de felicidad y tristeza, como cualquier otra persona. Juego a menudo fútbol con mis amigos. Algunos juegan descalzos porque no tienen dinero para comprar zapatillas. ¿Esto es lo que los convierte en refugiados? Me gustaría que mis hermanos y hermanas de Kordofán del Sur puedan tener acceso a la educación y sean capaces de construir un mejor futuro. Como profesor, siempre le digo a mis alumnos que se tomen en serio la educación”.

Samson huyó en el 2014 de la región montañosa de Nuba, afectada por la guerra en Sudán a causa del incremento de los enfrentamientos entre el gobierno y las fuerzas de oposición. “Había destrucción por todas partes” señala Samson. “decidí irme cuando me di cuenta que no podría recibir educación en medio de ese conflicto”. Samson es ahora profesor de inglés y religión en el campamento y sueña con convertirse en un periodista. “una maestría en Comunicación me ayudaría a conseguir mi sueño” señala. Pero su mayor esperanza es reunirse con sus padres y hermanos. “Los extraño tanto” dice Samson. “Ningún niño debería crecer sin sus padres”.

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