Buenaventura: Realidades brutales

A pesar de una fuerte presencia del ejercito y la policía los niveles de violencia continúan en aumento en Buenaventura. ACNUR/ L .Zanetti/ 2014

A pesar de una fuerte presencia del ejercito y la policía los niveles de violencia continúan en aumento en Buenaventura. ACNUR/ L .Zanetti/ 2014

Por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, el número de personas desplazadas forzadamente en el mundo ha superado los 50 millones. De estos, se calcula que unos 10,7 millones de individuos se hayan visto forzados a desplazarse en el solo 2013, 2,5 millones de ellos como refugiados y una alarmante cifra de 8,2 millones como desplazados internos, dentro de las fronteras de su propio país –el número más alto registrado por el ACNUR hasta ahora*.

Si bien las nuevas crisis humanitarias dominan los titulares de las noticias, muchas de las crisis de larga data han desaparecido de la primera plana de los medios de información.  Colombia puede ser uno de los ejemplos más llamativos de esta realidad, mientras sigue enfrentando una situación de desplazamiento interno masivo, con 5,7 millones de desplazados internos registrados a julio de 2014.  Con una duración de más de cinco décadas, el conflicto interno en Colombia ha causado una de las situaciones de desplazamiento de más larga duración en nuestros tiempos.

ACNUR / J. ARREDONDO / 2014

ACNUR / J. ARREDONDO / 2014

Colombia ocupa el segundo lugar, solo por detrás de Siria, en cuanto a número de desplazados internos. Según datos oficiales del Gobierno, 5,7 millones de personas se han visto forzadas a huir de sus hogares (desde 1997).

El 80% de las personas desplazadas en Colombia son mujeres y al menos el 50% de las mujeres desplazadas ha experimentado la violencia sexual y por motivos de género. Se trata al mismo tiempo de una causa directa del desplazamiento y de un arma de guerra utilizada por los grupos armados para tratar de imponer su control sobre las comunidades.

El puerto principal de Colombia en el Pacífico, Buenaventura, tiene una de las tasas de violencia y desplazamiento más altas del país, debido a los crecientes enfrentamientos entre grupos armados. Para demostrar su poder o por venganza, estos grupos con frecuencia abusan de los más vulnerables, las mujeres y los niños, y ejercen violencia sexual.

La escalada de violencia entre grupos armados ilegales rivales es la principal causa del número creciente de personas desplazadas. Gran parte de la población está en situación de riesgo.

Existe un temor generalizado a la violencia armada y a todo lo que ésta conlleva: reclutamiento de menores, violencia sexual, asesinatos, torturas, desapariciones. En muchos casos, huir es la única salida. Muchas de las personas desplazadas por esta violencia viven en los barrios más pobres de la ciudad y carecen de acceso a los servicios básicos.

En el primer semestre de 2014, once mujeres han sido asesinadas y tres de ellas han sido encontradas descuartizadas. Esta cifra ya supera el número de mujeres asesinadas en todo 2013.

Las ganadoras del Premio Nansen para los Refugiados 2014 son las integrantes de la Red Mariposas de Alas Nuevas Construyendo Futuro, una red de organizaciones que ayudan y empoderan a las mujeres, y luchan por sus derechos. Ante la violencia y la intimidación, las integrantes de esta red valientemente alzan sus voces y ponen sus vidas en riesgo para crear un mejor futuro para las mujeres de Buenaventura, Colombia.

El informe "Buenaventura: Realidades brutales" ha sido publicado en septiembre de 2014 por el Consejo Noruego para los Refugiados, con el apoyo del ACNUR.

El informe “Buenaventura: Realidades brutales” ha sido publicado en septiembre de 2014 por el Consejo Noruego para los Refugiados, con el apoyo del ACNUR.

Descargue el informe del Consejo Noruego para los Refugiados “Buenaventura, Realidades Brutales”

Este informe está basado en entrevista y trabajo de investigación. El informe demuestra cómo en Colombia la violencia afecte de manera desproporcional a las mujeres, en particular a las mujeres afrocolombianas, y cómo los grupos armados sistemáticamente recurran a la violencia sexual como táctica de guerra en el marco del conflicto interno.

“Somos todos víctimas, de una manera colectiva. Lo que le pase a mi vecino me pasa también a mí, afecta a toda mi comunidad. La violencia armada en general y la violencia sexual en particular ha acabado con las costumbres familiares y culturales de nuestra tradición. La gente ya no se queda sentada en la puerta de su casa compartiendo o jugando bingo, ni se habla con los vecinos, por miedo las venganzas. La violencia sexual ha reducido mi seguridad y mi capacidad de relacionarme con los demás. Me volví callada y desconfiada”.

Testimonio de una integrante de la Comunidad de Buenaventura.

* Fuente: Informe de Tendencias Globales del ACNUR 2013.


1 familia separada por la guerra es demasiado

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